¿Qué significará el tiempo sin relojes?

sábado, 26 de febrero de 2011

¿Qué pasaría si esta vez fuera la definitiva? ¿Qué sería de nosotros?

jueves, 24 de febrero de 2011



Tú y yo,
estamos unidos por algo más fuerte.
A ti y a mí,
lo que nos une es el destino.

jueves, 17 de febrero de 2011

Cuerpo.

Entonces la maquinaria paró en seco. El maquinista se levantó de su vieja silla blanca, alterado, y andó por todo el salón hasta que llegó a la máquina principal. La examinó, cada engranaje, ninguno parecía estar estropeado o fallar. Trataba de no aleterar nada y se fijaba en la letra que llevaba escrita cada ruedita de metal. Comenzó a salir agua de la máquina redonda, que estaba situada debajo de la principal. El hombre andó por todo el recinto, y éste comenzó a moverse, como si convulsionara e hizo que Adolfo -que así se llamaba el anciano maquinista- se cayera al suelo. Se arrastró hasta llegar de nuevo a la gran máquina de arriba, de la que salía humo, y sacó una llave de su bolsillo: Era roja y, aunque era vieja, parecía que nunca se había usado y acababa de hacerse. La metió en la pequeña cerradura que no debe abrirse, o al menos eso le habían dicho todos sus antecesores. Abrió el cajón y dentro encontró un montoncillo de engranajes que se le antojaron como bichos, estaban negros y giraban lentamente, produciendo un sonido que le puso los pelos de punta. Y pintado en rojo, sobre cada uno de ellos, estaba la letra A. A. Sólo había una parte importante de la máquina con la que nunca había interactuado y que comenzaba por A. Era la parte más complicada, más cerrada, más frágil. Amor, lo llaman. Pronunció esa palabra despacio, susurrando. ''A-mor''. Y cuando lo hizo comenzó a ver humo y más humo, cada vez más negro, y cada vez se movía más la máquina y salía más agua. Para cuando se dio cuenta, una de las máquinas se había partido por la mitad. Adolfo cogió sus pertenencias y salió del edificio. ''Tendré que buscar otro trabajo... Cuando falla el corazón, sea cuál sea de las dos máquinas con ese nombre, morimos. Cuando falla una muere el cuerpo, cuando falla la otra muere el alma y nos convertimos en un cuerpo que vaga por el mundo buscando que el alma vuelva a casa. Pero la sustituye algo más fuerte y que no deja paso: El vacío.''

martes, 15 de febrero de 2011



Sonríe.
Pero hazlo de veras, por dentro.
Y no caigas más en la noche estrellada, porque si sigues mirando se esfumarán las montañas y todo se volverá ciudad...


domingo, 13 de febrero de 2011

A veces, el camino más largo es la distancia entre dos personas.

...Eres increíble.
Te lo prometo, es cierto. Aunque, releyendo, creo que lo propio sería decir que eras increíble. Porque tengo que hacerme a la idea de que para mí ya no deberías existir... Podré recordarte, sí, pero no habrán recuerdos nuevos.
La última vez me dijiste que ibas a buscarme. Y quiero que lo hagas, porque hoy, precisamente hoy, te recuerdo y no debería hacerlo, porque me haces daño, porque sigues siendo el mismo hijo de puta.
Hoy, tengo el cuerpo en Canarias y el corazón en la península. Y sé que es imposible todo esto, porque aunque te busque nunca, NUNCA vas a correr hacia mí como prometiste, no nos casaremos como prometimos, ni me darás ese colgante (en mano).
Temblemos, porque el destino nos odia. Feliz San Valentín con un día de antelación.

Cosas para hacer hoy:
- Hacer los deberes.
- Fregar los platos.
- Echarte de menos.


sábado, 12 de febrero de 2011

23/3/10. Querido Diario:


Hoy ha sido un día complicado.
No pensaba salir de casa hasta que Allan me llamó y me animó a ir a dar una vuelta. Fuimos a donde siempre, pero no fue como siempre. Compramos granizada de café y, hasta ahí, bien. Entonces le miré y vi cosas que -según quiero recordar- nunca había visto en él. Me di cuenta de que, aunque lo niegue, la verdad siempre sale a la luz, y las mentiras y omisiones quedan aplastadas contra ésta. Se sentó al borde del callejón y yo no supe que hacer, porque tenía los ojos llenos de lágrimas.
Finalmente, me senté en el suelo, apoyada en el muro, a algo así de dos metros detrás de él. Se levantó y se sentó a mi lado, y no sé qué pasó pero cuando nuestros labios se rozaron volví a llorar. Lloré durante un rato, como una niña pequeña.
¿Por qué lloraba? Me lo llevo preguntando desde que la primera lágrima comenzó a salir de mis ojos. Y tengo teorías:
a) Miedo. A perderle, al rechazo, a los cambios, a mí misma, a quererle de otro modo.
b) Porque (puede sonar engreído, pero este es mi diario y no lo leerá nadie más) he visto como me mira. Y no sé si yo seré capaz de corresponder algo tan grande.
No puedo entender. Hay cosas que las personas como yo somos incapaces de asimilar, de pensar, incluso. El amor es una de ellas. Por la costumbre a sufrir o a no saber querer. Porque, nuestros corazones son una prisión con paredes rojas.
Alicia Lemoine.

martes, 8 de febrero de 2011

Hola :) No me gusta hacer este tipo de entradas, pero una vez al año no hace daño ^^U Me ha nominado mi querida amiga Eva (http://www.asesinandocorazones.blogspot.com/). Gracias por acordarte de mí :D
Bueno... tengo que poner siete cosas sobre mí. Ahí van ^^
1. Me llamo Aida, soy de Tenerife y tengo quince años.
2. Soy una persona muy supersticiosa. Tengo que hacer todo en el mismo orden cada día o pienso tonterías como: ''Oh, Dios, ¡hoy va a ser un mal día porque no me he atado primero los cordones del zapato izquierdo!''
3. Soy adicta a la Coca-cola y a la vainilla.
4. Quiero ser periodista.
5. Mi nombre ''artístico'' (Ross) viene de uno de mis apellidos, Rossi. Tan original yo (xDD).
6. Mi grupo favorito es Love of Lesbian, aunque mi canción favorita es All Apologies de Nirvana.
7. Quiero vivir en París, aunque sé que no me atrevería a irme de aquí.

Bien, supuestamente tendría que nominar a quince blogs, pero no me apetece (xDDD) así que nomino exclusivamente a un blog:
http://www.sweet-kisses.blogspot.com/

:) Saludos.


Aida. Akira. Ross. Aik. Como queráis llamarme.

domingo, 6 de febrero de 2011

¿Vas a volver SIEMPRE?

sábado, 5 de febrero de 2011

Días sin sentido


Porque el mundo es grande y parece no querer que sea mi sitio. Ahora cada día es idéntico al anterior, un bucle infinito, la monotonía siempre esperándome, y yo rota, cayendo. Siempre es lo mismo. Ojalá pudiera encontrarte ahora. No quiero esperar años, entiéndeme y aparece para entenderme por completo. Para ser un puzzle, para saber quién eres, para olvidar, para quererte. -Para ser un puzzle, para que sepas quién soy, para que olvides, para quererme.-


Hoy tengo uno de esos días tontos, ¿sabes? Uno de esos días en los que sólo te apetece sentarte al lado de la ventana y ver pasar el tiempo, evitando el tic tac del reloj que te recuerda que éste pasa rápido. Reflexionas sobre lo que has dejado escapar -tanto, tantísimo- y sobre lo que no. Sobre qué deberías hacer y cómo, aunque sea inútil.

Sabes que la vida está compuesta de pequeñas cosas, de pequeñas personas que a veces te fallan y a las que a veces fallas, que a veces te necesitan o necesitas tú. Sabes que esa tela de araña compuesta de personas es lo más importante y que debes conservarla intacta, suave, sólida aunque frágil. En vez de esperar, te das cuenta de que debes moverte tú y buscar... Pero hoy no, hoy es uno de esos días tontos.

Juliette.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Y en mi cabeza está tu cuna.



Eres luces apagadas,
y costuras desvaradas,
eres noches de tormenta
y dolores sin molestia,
eres un corazón roto
y miradas de alboroto,
eres amor sin dolor
pero creo que has calado hondo.
¡Eres parte de mí!