¿Qué significará el tiempo sin relojes?

domingo, 11 de mayo de 2014

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Le da la vuelta, y lo hace con la mano izquierda, la mano inútil, la mano idiota. No lo mira. Me clava las pupilas a mí, y el alma a mí, y se vierte por los ojos sobre mi cuerpo. Se desparrama en mis costillas. Y, sin embargo, permanece tan entera, tan íntegra, que aparenta que no se está derritiendo, que no se le vuelven agua las vísceras, que no se le escapan los sentidos por los poros, que no se suda a sí misma.
Gira el reloj de nuevo. La arena, que ni siquiera había empezado aún a caer, se afianza de nuevo en la que antes era su base. Esta vez sí lo mira, deja de mirarme y lo mira, y yo oteo cómo su espalda se vuelve hierática y los dedos se aprietan a sí mismos para después, pum, destensarse...
Yo intento acercarme, y tocarle la espalda, y ponerle un dedo encima y sentir que no es agua, que su cuerpo no se desliza en forma de gotas suicidas. Y no puedo, porque de pronto se gira, y me mira y la miro, y entonces sé que le ha dado la vuelta al reloj, y pienso en lo tristes que deben de sentirse los granos de arena, que siempre van de una casa a otra, como los niños maleta.
Puta. 
Tres minutos, suspiro con voz, tres minutos, el reloj dura tres minutos... La arena tarda tres minutos en caer, y durante tres minutos los granitos de desparraman contra el vidrio, y quizás sólo esos tres minutos de acción compongan la tranquilidad. Tres minutos. Pero tú, suspiro callada, tú no dejas que avance, no dejas que ande, tú no dejas que el reloj me chille que aún hay tiempo. Tiempo para no hacer nada, o para salvarme. Tiempo de mierda, que no sé cómo voy a utilizar, pero que me dará un momento, espero, para pensar. 
Sólo es un reloj de mierda, y es feo, y no me gusta. Y nunca lo utilizo, porque no entiendo de qué me va a servir cuantificar tres minutos que sólo dan para lavarse los dientes, o para dibujar un ojo, o para andar a casa. Y es sólo eso, tres minutos, un segmento de tiempo tan pequeño, tan, tan nimio que se vuelve estúpido. Qué más da, son tres minutos, tres minutos, tres...
¿Qué significará el tiempo sin relojes?, exhalo, ¿qué significará, sin relojes?... ¿Y si es una idea vaga, y si al final el mundo se desmorona, y si, al no haber tiempo, ya no hay imposición social? ¿Y si nadie me dicta el ritmo, y si no envejezco, y si da igual que me vuelva vieja y se me arruguen las manos y tenga experiencia, y si nunca soy demasiado joven, y si nunca debo crecer del todo, y si nunca tengo certeza de que soy yo, soy yo y nadie más? ¿Y si al final no es nada, y si el mundo se basa en el tiempo, y si la vida es más corta y los días más largos? 

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